A veces nos da miedo probar cosas nuevas. Y es que tendemos a acostumbrarnos a hacer siempre lo mismo y no hay quien nos saque de ahí. Porque hacer algo diferente siempre implica riesgo, y… Eso puede salir mal, pero sólo así se descubren cosas maravillosas. Esta simple filosofía se puede aplicar a la receta de hoy.

El porridge de avena lo habrás visto mil veces por Instagram, el 90% del tiempo con fruta, frutos secos y alguna cosilla más. Que conste que a mí me encanta tomarla de esta forma. Pero son pocos los que se animan a prepararlo en versión salada. Es una opción más desconocida, más atrevida, más arriesgada. ¿Te atreves a probarla? Ou yeah!

En esta ocasión vamos a dejar la fruta a un lado y vamos a utilizar 2 ingredientes que se llevan muy bien: el huevo y el queso parmesano. Ya te aviso de que esta combinación es simplemente orgásmica, me lo vas a agradecer 🙂

Ingredientes:

  • 60 gr. de copos de avena (o la cantidad que te dé la gana)
  • 1 cucharada de queso parmesano rallado
  • 1 huevo campero
  • Agua (este ingrediente es algo difícil de encontrar, pero confío en ti)
  • Leche, un chorrito.
  • Cebollino, cilantro o perejil frescos para decorar
  • Sal y pimienta negra

Pasos:

  1. En un cazo a fuego alto, echa la avena y cúbrela con agua medio dedo por encima.
  2. Mientras tanto, haz un huevo a la plancha en una sartén.
  3. Cuando la avena haga ‘chup,chup’, remueve y cocina a fuego lento hasta que haya absorbido todo el agua. ¡Ya puedes añadir el parmesano!.
  4. Ahora que la avena tiene una textura consistente, echa un chorrito de leche, salpimenta y viértela en un bol. Añade el huevo a la plancha y el cebollino picado por encima.

Ya puedes morirte del gusto.

Coconsejos:

  • Puedes hacer esta receta toda con leche en lugar de utilizar agua. Te quedará más consistente, pero algo menos ‘ligero’.
  • El porridge salado puede ser una genial opción de desayuno, pero para una cena calentita también sienta estupendamente.

Si pruebas esta receta me gustaría que me lo contaras por comentarios. ¿Te quedas con la versión dulce o salada?

 

Con amor,

Marta. (O Coco)

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